Tapachula. Chiapas.-Los festejos del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana, enmarcan un evento de gran relevancia y tradición para los tapachultecos, la Feria de San Agustín, celebración que es puerta de entrada al entretenimiento, cultura y convivencia familiar para miles de habitantes de esta región y de la Hermana República de Guatemala.
Una amplia gama de colores, aromas, sabores y texturas, han sido preparados para la Feria del Santo Patrono de los tapachultecos, que inició desde el pasado 19 de Agosto con importantes demostraciones de Baile Folklórico, Muestras Gastronómicas, Exposiciones, Actividades Religiosas, entre otras.
A la fecha, el magno evento se ve envuelto entre en los escenarios normales de convivencia social; donde la población solicita a las autoridades de los tres niveles de gobierno, mantener una vigilancia minuciosa para que los festejos al Santo Patrono, transcurran con calma.
Secretos de la parroquia Costeña
Pero lejos de los festejos exteriores, la Iglesia de San Agustín, guarda muchos antecedentes históricos desde hace 300 años. Los encuentros entre frayles dominicos y españoles, han enraizado las creencias católicas y los cuentos plagados de usos y costumbres no solamente en Tapachula, porque se extendieron en todos los municipios de la frontera Sur, en donde también predomina la perdida de usos y costumbres ante la globalización.
En Tapachula, la Iglesia Católica de San Agustín tiene historia y según fuentes extraoficiales, afirman que su fundación se realizó hasta en 1819, por misioneros evangelizadores que tenían como meta extender las creencias religiosas en el Sureste mexicano y Centroamérica.
La iglesia de San Agustín fue construida en un principio de otate con techo de paja, después en agosto de 1857, el párroco Julián Bermúdez se percató que la iglesia era de barro y con techo de paja.
La iglesia de San Agustín se encontraba en mal estado, así que el prelado temía que el techo se viniera a bajo y se lastimaran los feligreses.
La sobrevivencia para sus feligreses
Así, el padre Julián Bermúdez comenzó a hacer las gestiones necesarias para la construcción de la iglesia; para el 30 de enero de 1858, el párroco Julián Bermúdez fue nombrado por el Ayuntamiento presidente de la junta inspectora pro-constructora de la iglesia de San Agustín, de inmediato comenzaron la construcción de la iglesia, pero para finales de 1858, sólo lograron cambiar el techo de paja a teja.
Bermúdez comenzó la construcción de la iglesia de San Agustín en 1859, misma que concluyó en 1862; es decir, tres años después de iniciados sus trabajos. Sin embargo, no pudo disfrutar mucho de la obra a la que le faltaba fachada y una torre, porque murió en 1863.
Para 1864 la iglesia de San Agustín continua inconclusa, en ese mismo año arribó a la localidad el cura Manuel de Jesús Reyes, quien finalizó la obra de su antecesor.
Fue el 11 de diciembre de 1884 cuando comenzaron con la última parte de la construcción de la iglesia de San Agustín, recinto que fue concluido en agosto de l885; así la iglesia quedó construida con una fachada principal y tres torres, además de un reloj que se encontraba en el centro de la iglesia.
El padre Manuel de Jesús Reyes también construyó la casa "Curatal" o mejor conocida como la casa sacerdotal, ubicada en lo que ahora es el parque Juárez, donde se contaba con un bautisterio, un despacho, una sala, alcoba y un cuarto más.
Esa infraestructura inició su construcción el 15 de 1886 y se concluyó en agosto del mismo año; el prelado Manuel de Jesús estuvo al frente de la iglesia de San Agustín hasta el año de 1895.
Además sobre la 5ª calle Poniente se encontraba una casa de barro y tablas que era la sacristía, pero fue expropiada por el general Obregón el 24 de octubre de 1923, ahí se estableció las oficinas de Recaudación de rentas.
Ese centro de recaudación fue demolido a principios de la década de los noventas, para edificarse el actual Parque de las Etnias; además, la torre central de la iglesia de San Agustín desapareció, luego del paso de un temblor en el año de 1942.
Así también, la iglesia de San Agustín sufrió la represión por parte del gobernador del estado Victorico Grajales, quien no permitió el culto desde junio 1932; pero fue abierta la iglesia hasta el 15 de octubre de 1937 por orden del gobernador Efraín Gutiérrez; sin embargo, las actividades religiosas comenzaron hasta el seis julio de 1938.
En su haber, la Iglesia de San Agustín pasó de parroquia a Catedral en el año de 1958, por ser la sede de Tapachula que fundó el obispo Adolfo López Hurtado. “Rubén Zúñiga-Reportero”.
Templo Modesto del siglo XVIII
Para Arturo Chairez, investigador de México desconocido, la Iglesia de San Agustín, se ha catalogado por ser un templo prominente de las tierras de Chiapas por su belleza y su modestia.
Fue a finales del siglo XVIII que quedó concluido y ciertamente solamente había sido edificado por materiales como el denominado turrón; una mezcla especial de barro y sustancias pegajosas que le dieron la consistencia entre sus paredes.
La finalidad de los frayles fue garantizar un templo a sus feligreses y se logró gracias al establecimiento de la arquitectura neo- clásica, especialmente plasmada en su fachada, sus columnas jónicas de cuerpo estriado y sus puertas gruesas de madera que se ubica en una de las calles principales de Tapachula, como es la 8ª avenida Sur.
Para funcionarios del Ayuntamiento de Tapachula, las ferias parroquiales en Chiapas, son de gran riqueza cultural. En su caso, la población las considera eventos para disfrutar la convivencia sana, que comienza con un leve recorrido a pié, por los negocios de artesanos, los clásicos juegos y ruedas de feria tradicional y el deleite de comida chiapaneca como tamales, tacos y churros..
La feria de San Agustín, tiene el objetivo desde hace muchos años de promover la convivencia familiar, la educación, cultura y recreación de las niñas y niños, entre otras actividades que van paralelas a las presentaciones musicales y artísticas de grupos mexicanos y centroamericanos.
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